Japón exige revisión inmediata de todos los Boeing 787 de aerolíneas niponas
El 12 de junio de 2025, el Boeing 787‑8 (matrícula VT‑ANB) operado por Air India impactó contra el terreno segundos después de despegar de Ahmedabad, con 242 ocupantes (230 pasajeros y 12 tripulantes). El accidente causó 241 víctimas mortales a bordo y al menos 28 en tierra, con un único sobreviviente, un ciudadano británico, informado por Kyodo y otras fuentes. Este es el primer accidente fatal en la historia del programa Dreamliner, en servicio desde 2011.
Reacción preventiva en Japón: inspección técnica obligatoria
El 13 de junio de 2025, el Ministerio de Tierras, Infraestructura, Transporte y Turismo (MLIT) de Japón ordenó a ANA, JAL, y sus filiales AirJapan y ZipAir inspeccionar motores y fuselajes de sus más de 130 unidades Boeing 787 en servicio. Aunque no suspendieron su operación, se pidió una revisión exhaustiva en busca de anomalías estructurales, motores, trenes de aterrizaje y/o de sistemas críticos, recopilando datos para un posible escalado de medidas. El ministro Hiromasa Nakano declaró que Japón seguirá de cerca la evolución de la investigación india.
Este procedimiento recuerda las medidas tomadas en 2013, cuando tras incidentes con baterías en ANA y JAL, todas las 787 operadas en Japón fueron temporalmente inmovilizadas.
Contraste con la posición de EE.UU.
Por su parte, regulator estadounidense (FAA) y autoridades del Departamento de Transporte señalaron que no existen evidencias hasta ahora que justifiquen la puesta en tierra (grounding) de los Dreamliners en EE.UU. El Administrador Interno de la FAA, Chris Rocheleau, afirmó que sería “prematuro” tomar decisiones sin concluir el análisis. La FAA colaborará con la NTSB, Boeing y GE Aerospace, y está lista para implementar medidas correctivas si se identifican riesgos. Mientras tanto, el ministro Nakano subrayó que “se tomarán medidas necesarias conforme la investigación avance” .
Las inspecciones japonesas incluyen revisión de motores, montajes del fuselaje y sistema de tren de aterrizaje. Tal protocolo podría revelar fallas similares detectadas en otros operativos. En caso de que las aerolíneas de Japón consoliden hallazgos propios, se podrían revelar estos datos, sumando valor en análisis estructurado y predictivo.