Un Airbus A321XLR de Iberia regresa de emergencia tras la colisión con un ave en Barajas
Un vuelo de Iberia con destino a París regresa a Madrid tras un grave impacto con un ave, dejando daños estructurales
Un Airbus A321-200N de Iberia, con registro EC-OOJ, que operaba el vuelo IB-579 desde Madrid (España) hacia París Orly (Francia), protagonizó un regreso de emergencia al aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas tras colisionar con un buitre a unos 7.000 pies de altitud. El impacto, ocurrido poco después del despegue desde la pista 36L, generó serios daños estructurales, incluyendo la destrucción del radome, daños en los alabes del motor izquierdo, y fallos en los sistemas de instrumentación, obligando a la tripulación a declarar un «Mayday».
Fallos múltiples, maniobra impecable y apoyo en tierra
El avión, prácticamente nuevo con menos de un mes en operación, despegó a primera hora de la tarde cuando el impacto con el ave provocó humo en la cabina y lecturas erróneas en los instrumentos de velocidad. La tripulación detuvo el ascenso a 7.000 pies y, siguiendo estrictos protocolos, apagó los packs de aire acondicionado y manejó la aeronave en la «franja verde» del sistema Fly-by-Wire, garantizando un regreso seguro a pesar de operar con un solo motor. Excelente actuación de la tripulación.
La maniobra de regreso, que incluyó una aproximación por el sur pasando sobre la sierra y rodeando la zona de Getafe, fue apoyada por una impecable coordinación de los controladores aéreos, quienes priorizaron el tráfico para facilitar el aterrizaje de emergencia en la pista 32L, completado 25 minutos después de la salida. Tras el aterrizaje, el avión permaneció en la pista durante unos 25 minutos antes de ser remolcado a una zona de mantenimiento. Los bomberos del aeropuerto estuvieron presentes de inmediato para inspeccionar la aeronave y garantizar la seguridad, asistiendo también a la tripulación.
Tras el incidente, una tripulante de cabina de pasajeros (TCP) tuvo que ser atendida y el resto de la tripulación de vuelo fueron asistidos por inhalación de humos, aunque no se reportaron lesiones graves. La rápida respuesta de los bomberos y los servicios médicos fue clave para atender a los afectados.
Daños visibles
Las imágenes posteriores al aterrizaje revelaron una perforación significativa en el radome, la estructura que protege el radar meteorológico, junto con daños en los alabes del ventilador del motor izquierdo. Este tipo de incidentes, conocidos como bird strikes, son un riesgo conocido en la aviación, especialmente en aeropuertos como Barajas, rodeado de áreas naturales donde aves grandes, como buitres, son frecuentes.
Aunque las aeronaves modernas están diseñadas para resistir estos impactos, la combinación de fallos simultáneos —motor, humo y sensores— destaca la importancia de la formación de las tripulaciones y los sistemas de seguridad. “Es una situación donde la pericia y los procedimientos son cruciales. Los pilotos actuaron de forma ejemplar”, afirmó un comandante retirado de Iberia.
El auge de los buitres en España y su impacto en la aviación
En Europa, el 90% de los buitres se encuentra en España, con una población estimada entre 95.000 y 122.000 ejemplares, lo que representa un crecimiento significativo desde los apenas 5.000 individuos registrados en 1979. Este aumento, positivo para la biodiversidad, plantea desafíos para la aviación, especialmente en regiones como Madrid, donde los incidentes con aviación general y ligera se concentran principalmente al norte, sur y oeste de la región, afectando a diversos tipos de aeronaves.
En el Aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas, las operaciones comerciales (CAT) con aeronaves grandes han registrado el mayor número de sucesos, especialmente durante maniobras de despegue y aterrizaje. Según el informe de la Comisión de Investigación de Accidentes e Incidentes de Aviación Civil (CIAIAC), en los últimos 25 años (2000-2024) se han investigado 30 accidentes e incidentes graves relacionados con impactos de aves. De ellos, 19 fueron accidentes y 11 incidentes graves, con un saldo de 16 fallecidos en siete de los accidentes. En el 74% de los casos en los que se identificó el ave, se trató de buitres (9 leonados, 2 negros y 6 sin especificar).
Medidas para prevenir futuros incidentes
La colisión con aves es un desafío persistente en la aviación. Aeropuertos como Barajas emplean sistemas acústicos, cetrería y radares especializados para detectar bandadas.
La aeronave permanecerá fuera de servicio mientras técnicos de Iberia, Airbus evalúan los daños para determinar el alcance de las reparaciones.
Este accidente (ya que existen daños estructurales en la aeronave) subraya la necesidad de seguir innovando en la gestión del espacio aéreo para minimizar riesgos, garantizando la seguridad de pasajeros y las tripulaciones.