Airbus admite un nuevo problema de calidad en el fuselaje de la familia A320

El fabricante europeo reconoce una incidencia industrial en paneles metálicos de fuselaje que afecta a “un número limitado” de A320, añade presión a su calendario de entregas y llega pocos días después de la masiva campaña de actualización de software en la flota.

 Airbus ha reconocido la existencia de un problema de calidad en paneles metálicos de fuselaje suministrados para “un número limitado” de aeronaves de la familia A320, lo que obliga a inspeccionar varios aviones en producción y ya está provocando retrasos en algunas entregas. La compañía subraya que no hay indicios de que el posible defecto haya llegado a aparatos actualmente en servicio, por lo que el impacto operacional inmediato para las aerolíneas se centra en la planificación de flota y no en una inmovilización masiva.​

Alcance del fallo y medidas de inspección

Según la comunicación trasladada a distintos medios, Airbus describe el caso como un “problema de calidad de proveedor” que afecta a paneles metálicos de fuselaje y habla de un volumen acotado de aviones, “varias decenas” de unidades dentro del gigantesco programa A320. El fabricante afirma que ha identificado y contenido el origen del problema y que todos los paneles producidos actualmente cumplen los requisitos técnicos y de certificación aplicables, mientras aplica inspecciones adicionales sobre los aparatos potencialmente afectados.​

Impacto en el calendario de entregas y en el mercado

El hallazgo llega en un momento de máxima presión para Airbus, que necesita un mes de diciembre récord para alcanzar su objetivo anual de entregas y ya venía arrastrando tensiones por cuellos de botella industriales y por las restricciones en motores y cadenas de suministro. Diversos analistas señalan que el problema de fuselaje ya está retrasando “algunas” entregas de la familia A320 y ha contribuido a caídas bursátiles cercanas a dos dígitos, al aumentar la percepción de riesgo sobre el cumplimiento de los objetivos comerciales de fin de año.​

Contexto: del fallo de software al fuselaje

Este nuevo episodio de calidad se suma a la reciente campaña global para corregir un fallo de software en los ordenadores de control de vuelo de la familia A320, vinculado a posibles corrupciones de datos por radiación solar intensa y que motivó acciones precautorias sobre unos 6.000 aviones. Aunque Airbus presenta ambos expedientes como cuestiones independientes, el encadenamiento de una alerta de software y un problema estructural en el mismo programa estrella refuerza el escrutinio regulatorio y mediático sobre los procesos de diseño, certificación y control industrial del fabricante europeo.​

Mensaje de Airbus a aerolíneas e inversores

En sus declaraciones, Airbus insiste en que está adoptando un enfoque “cauteloso”, inspeccionando todas las aeronaves que podrían estar afectadas, aun sabiendo que solo una parte requerirá acciones correctivas, y recalca que la seguridad sigue siendo la prioridad absoluta por delante de los objetivos de producción. La compañía intenta, al mismo tiempo, tranquilizar al mercado subrayando que el problema no compromete la operación de los A320 ya entregados y que el aumento de la producción de fondo mantiene vivo el objetivo anual de entregas, aunque varios analistas ya advierten de que el margen de maniobra se estrecha significativamente.

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